¿Yo, un padre helicóptero? Seguro que no. Esta es la respuesta que seguramente estés dando al leer el título del artículo pero, ¿realmente sabes qué es un padre helicóptero? En este artículo nuestra psicóloga en Málaga qué son los padres helicópteros y cómo afectan a la vida de sus hijos, además de dar unas pautas para simplificar la infancia de los menores.
Desde hace algún tiempo, son cada vez más los niños y adolescentes que están desarrollando problemas psicológicos. Uno de los motivos principales es a causa de los padres helicóptero.
¿Qué son los padres helicópteros en psicología?
Estos padres, son los que protegen y a su vez exigen en exceso a sus hijos, dotándoles de demasiadas opciones, tareas, y objetos. Se practica de este modo la hiperpaternidad, pues creemos que todo ello les prepara para la vida o les hará más felices y se sentirán más completos.
Los niños de hoy en día cada vez tienen más estímulos a los que atender: los cientos de juguetes que tienen, los teléfonos móviles, tabletas, ordenadores, consolas… Como dato curioso, se estima que por cada niño occidental existe una media de 150 juguetes, esto es excesivo, y cuando algo es excesivo tiende a agobiar. Por lo que no le prestan la suficiente atención a un juguete cuando ya tienen que ponerse con el otro, pierden el interés y por supuesto, no desarrollan su imaginación.
Los 4 pilares de excesos de nuestros días
Según Kim Payne, existen 4 pilares de excesos en la actualidad:
- Demasiadas cosas.
- Demasiadas opciones.
- Demasiada información.
- Demasiada velocidad.
De esta forma no les permitimos a nuestros hijos: explorar, descubrir, crear e imaginar. Les estamos limitando su capacidad de aprender descubriendo, pues le damos todo hecho. Cuando proporcionamos tantas cosas a nuestros hijos, finalmente le estamos quitando su libertad y no les enseñamos lo importante que es aburrirse, pues es en ese momento cuando la capacidad de creación y la imaginación puede desarrollarse hasta límites insospechados.
La sociedad ha cambiado radicalmente la manera de ver la infancia, hasta el punto que algunos profesionales han hablado de este fenómeno como “la guerra contra la infancia”. En los últimos años la infancia ha cambiado de manera brutal y sino piensa en tu infancia y la de los niños que actualmente tienes a tu alrededor. La mayoría de su tiempo gira en torno a la orientación académica, muchas horas de colegio, actividades extraescolares, demasiados deberes… Poco tiempo para relacionarse con sus iguales, y poco tiempo para divertirse.
Antes, al tener más tiempo libre teníamos que desarrollar nuestra imaginación para inventarnos nuevos juegos y nuevas formas de divertirnos. Actualmente se le da todo hecho y creado de manera estructurada para que sólo tengan que ponerse a jugar. Aunque sigue siendo la falta de tiempo el mayor problema.
Solución como psicóloga en Málaga
Desde nuestra Qicenter Málaga, te damos una solución muy sencilla, simplificar la infancia de tus hijos, ¿cómo de complicado es?
Pues bien, se trata de dejar que los niños sean simplemente eso, niños. Es necesario proporcionarles equilibrio mental y emocional, y no hay mejor manera que hacerlo desde la simplicidad:
- Dejarles tiempo libre para que jueguen, exploren. No dejarles juegos que ya estén estructurados, sino algunos que le ayuden a desarrollar su creatividad, o juguetes pequeños como un par de coches, un balón o dos muñecas.
- Especialmente, dedicarles un tiempo de calidad al día. Estar con ellos, hablar, jugar… no importa que sean diez minutos o una hora, pero sí que sea un tiempo óptimo.
- Que tengan su pequeño rincón donde puedan alejarse de todo aquello que les haga sentir nerviosos o estresados.
- Tener seguridad de que descansan y se alimentan de manera correcta. Es algo muy importante en el desarrollo de la infancia.
- No apuntarles a muchas actividades extraescolares para ocupar su tiempo. Son niños, ¡tienen que disponer de él!
- Reducir la cantidad de información. Cuidado con lo que le decimos a nuestros hijos y el lenguaje en el que le comunicamos las cosas, son niños y no tienen por qué saber o entender ciertas cosas que no van acordes a su edad.
- No compres muchos juguetes, no los necesitan.
¡¡Así que recuerda, deja que tus hijos sean simplemente…niños!!
“La infancia tiene sus propias maneras de ver, pensar y sentir; nada hay más insensato que pretender sustituirlas por las nuestras” Jean-Jacques Rousseau
